Como la música

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Todo lo que ella dice suena bien. Me hace abrir más los ojos y me temo que hasta la boca. A decir verdad, me preocupa que su hablar sea como la música, porque ésta, cuando es bonita y está bien interpretada, siempre nos hace adecuar nuestro estado a su ritmo y emoción. A lo mejor su letra es absurda, insidiosa o nefasta y sin embargo llevamos el compás. Hago lo que puedo por liberarme del influjo de aquellas personas que son como la música, cuya gracia y maneras te hacen pasar por alto sus pensamientos y sus hechos reales. ¿Cómo me defenderé de su risa? Al menos sus palabras las puedo analizar. ¿Pero qué hago con su risa?

Hoy

Hoy te necesito. No me preguntes por qué. No es que no lo sepa. Lo sé, pero por favor, no me lo preguntes. Hoy me vendría bien tu calor y tu ayuda. Tu charla y tu risa. Hoy querría dormir profundamente. Sin embargo, aquí me tienes, esperando que algo pase, dentro o fuera de mi cráneo, no estoy seguro, pero aspirando a que algo suceda.

¿No te estará pasando a ti lo mismo?

Amor

No es la mentira lo que nos aleja a ti y a mí. Al contrario. La mentira es el cemento que nos une. La verdad nos desilusiona y nos separa, no la mentira. La mentira está asociada a nuestra voluntad de querernos y seguir unidos pese a todo.

Se busca

Se busca

Se busca música sin letra. Miradas sin comentarios. Compañía silenciosa. Soledad sin patetismo. Se busca paz.

Pido la mirada del perro fiel, que jamás decepciona, porque su conducta no está adulterada con palabras. Dame tu silencio y el mío. No puedes llegar a mi corazón antes que yo. No es necesario que digas nada.

Se busca tiempo, se precisa lejanía, distancia. Se necesita olvidar o recordar quizás. Solo quiero que estés cerca por si tuviera que abrazarte. Por si lograse llorar.

Quiero que andes a mi lado sin tomarme por un loco. Que admitas que lo que siento es también por tu culpa, aunque no me conozcas, porque todos somos parte de la decepción de los otros.

Quiero que me acompañes en silencio hasta que mi memoria se niegue a recordar todo esto. Hasta que me perdone a mí mismo por no ser un poco mejor que los demás.