Nada parecido a la realidad,
nada posible.
Nada que pueda extrañar,
nada añorable.
Nada que vaya a necesitar o preferir.
Nada deseable.
Nada que pueda querer.
Ni nadie.
Algo que pueda sentir,
por alguien.
Nada que me pueda ilusionar.
Ni hundirme