Único problema

1011866_395602080551204_2047779873_n.

A veces la solución no está en seguir tratando de desatar el nudo gordiano, sino en cortarlo. No puedo dedicar mi vida a resolver un único problema o a desenredar un solo nudo. Y menos si además no estoy consiguiendo nada. Hay que cortar.

Tiempo

Hay una guitarra eléctrica que suena desde la casa de al lado. Parece ser un estudiante, porque repite todo el tiempo los mismos acordes. Me gusta.

Cuántas cosas me faltan por hacer.

Suena melancólico el comentario. Sin embargo, morir debe de ser sentir que ya no tienes nada más que realizar.

No es mi caso.

La guitarra sigue sonando. Se enreda en una especie de bucle de notas entre psicodélicas y morunas. Me siento libre al oír ese austero pero sentido solo de guitarra que me ofrece algún vecino.

Quiero actuar más.

Voy a hacer mucho más.

Aunque pensandolo bien…

Me estoy equivocando. No hay que pensar solo en lo que se quiere hacer. Eso solo me aportará experiencias, momentos, aprendizajes. Es mucho, está muy bien. Pero no debo pensar solo en lo que quiero hacer y vivir. Debo enfocarme en lo quiero conseguir.

¡Largo!

Un espabiladillo menos a mi alrededor significa aportar a mis cosas más tiempo. Ese que nadie tiene que hacerme perder.

Advertecia a la gente que dice que soy muy educado. No es cierto. Hay un bruto dentro de mí. Un energúmeno que acecha.
Soy tan sofisticado como un huevo duro. O quizá, como dos. Soy de al pan pan.
Me gustan las cosas claras, y con los contornos bien delimitados. Creo en lo bueno y en lo malo. En lo correcto y en lo incorrecto. En lo hermosos y en lo feo. Prefiero lo primero. Me gusta lo noble, detesto a los impresentables, y los alejo de mí. Y no soporto la más mínima pillería. Soy en eso muy estricto. A veces hay gente a la que le das la mano y mientras te sonríe notas que está pensando el modo de aprovecharse de ti. Si tratan de quitarme 10.000 euros es grave, pero si lo que me quitan vale como un simple cigarrillo, es mucho peor.Cuanto más nimio es lo que te hurtan, más pequeños, miserables e innecesarios son esos personajes insolentes y menos valoran tu amistad. Y en un mundo de listillos, es decir, en el mundo que hay, acepto mi incompatibilidad con todo eso a cambio de un aislamiento espléndido. A mi alrededor quiero verdaderos humanos. Los insectos que se vayan a cumplir con su función fuera de mi casa.

El listo

CEREBRO-MANOS-b
Tenemos un órgano que va de listillo, que se llama cerebro. Tanta soberbia tiene este simple trozo de persona que nunca deja de opinar sobre todo, analizarlo todo, y de responder ante cualquier cosa que suceda. Su misión es básicamente resolver problemas, para satisfacer nuestras necesidades, que en muchos casos crea él mismo. Cuando no tiene problemas que resolver, los inventa. El caso es no parar. 
Querida mía

Querida mía

Querida mía.

Desde que te fuiste lo he pasado realmente mal. Me he sentido como un trapo. He salido a buscarte, pero no sabía por dónde. He querido llamarte, decirte a gritos que junto a mí siempre tendrás cabida. Pero perdí mis fuerzas. ¡Estaba tan triste! ¡Tan indefenso sin ti! Me hundí.

A medida que me fui deprimiendo noté que algo en mí estaba cambiando. Me deterioraba. Empecé a enfadarme con todos y por todo. Me volví más irascible que nunca. Entonces comprendí que ya habías vuelto a casa, conmigo. Te quiero, rabia mía. Vamos a volver a hacer mil cosas juntos. Sí,  mi rabia y yo. Tú has vuelto y también he vuelto yo.captura-de-pantalla-2011-12-03-a-las-23-13-091

Te quiero, rabia mía. No sé si nos comeremos el mundo, pero al menos le daremos un buen mordisco. Te necesito. Salgamos. Tú me ayudarás a poner muchas cosas al día. Juntos podremos.